Ayahuasca como un fenómeno tríptico:
La Infusión
Investigaciones demuestran la variabilidad de la infusión en su composición química. Factores dependientes, de las plantas y del lugar de origen, de la hora de la recolecta, de la preparación (cantidad relativa de las dos plantas, grado de apuro y tipo de agua utilizada – factores como pH, tenor mineral del agua) todos influyen en la calidad de la infusión y, por lo tanto en sus efectos. La cantidad utilizada durante una ceremonia es también un factor decisivo. Cantidades ha-bituales o moderadas permiten una obser-vación mejor de sus propios contenidas, un estudio detallado de su propia psico-dinámi-ca. Cantidades mayores son necesarias para “viajar en el astral” en el lenguaje de los usuarios de algunas sectas. La utilización de grandes cantidades de infusión, por encima de los 300 mililitros, en una única toma-da es más bien aprovechada en ambiente especifico, más reservados con una supervi-sión adecuada favorece el tipo de vivencia descrita en la fenomenología como “experiencias místicas”.
Con una practica adecuada y un considerable trabajo sobre si mismo es posible llegar a los mismos resultados con dosis menores.